Miami-EEUU/ 1-2-2017
El decreto del presidente Trump suspendiendo la admisión de refugiados en EE.UU. durante 120 días podría afectar a los médicos cubanos que han solicitado un ‘parole’ para entrar al país, publica El Nuevo Herald.
En las últimas cuatro décadas más de tres millones de refugiados se han beneficiado del programa de reasentamiento, basado en “un temor fundado de persecución por razones de religión, raza, nacionalidad, opinión política o pertenecer a un grupo social particular”, de acuerdo al Departamento de Estado.
Trump suspendió el programa de refugiados durante cuatro meses, el plazo que los secretarios de Estado y Seguridad Interna utilizarán para revisar el proceso de solicitud y determinar si se requieren más medidas para “asegurar que los refugiados aceptados no sean una amenaza a la seguridad y el bienestar de Estados Unidos”.
Suman miles los médicos y otros profesionales cubanos de la salud que actualmente están varados en países como Colombia tras abandonar sus “misiones internacionalistas” a las que el régimen cubano les había enviado.
Con el fin de la política de “pies secos, pies mojados”, decretado por el expresidente Barack Obama, también se dio el fin del programa de Cuban Medical Professional Parole, que también dejaría en el limbo a los galenos de la isla que han solicitado refugio al gobierno de Estados Unidos.
“La suspensión del programa de refugiados puede afectar a estos médicos cubanos. Es una gran interrogante cómo se aplicará (la orden de Trump)”, dijo a El Nuevo Herald el abogado de Miami especializado en temas migratorios Wilfredo Allen.
Sin embargo, la suspensión del programa de refugiados no afecta el programa de reunificación familiar o la lotería de visas que permite al menos a 20 000 migrantes cubanos reasentarse en EE.UU. cada año. Tampoco afectan este programa, procesado por la embajada estadounidense en La Habana, el fin de la política de “pies secos, pies mojados”.
Fuente: El Nuevo Herald/ Cubanet.org