Agencia/ 31-1-2015

El dictador supervisó maniobras conjuntas de la armada y la fuerza aérea norcoreanas simulando un ataque contra un portaaviones estadounidense. Aseguró que está listo para cualquier tipo de conflicto bélico

El máximo líder norcoreano Kim Jong-Un, dijo que Pyongyang no se quedará de brazos cruzados "con perros rabiosos ladrando" acerca de derrocar su sistema socialista, en aparente respuesta a comentarios del presidente estadounidense, Barack Obama, que dijo que el régimen de Pyongyang estaba condenado al fracaso, según informó la prensa estatal el sábado, informa AFP.

Kim Jong-un hizo estas declaraciones en tanto supervisaba unas maniobras conjuntas de la armada y la fuerza aérea norcoreanas, simulando un ataque contra un portaaviones estadounidense apostado en Corea del Sur, segun la agencia de prensa oficial norcoreana (KCNA).

La fuente no dio detalles sobre el lugar y fecha de los simulacros de guerra, pero se cree que tuvieron lugar el viernes.

"Solemnemente declaró que (Corea del Norte) no se quedará con los brazos cruzados con los perros rabiosos que ladran abiertamente que van a hacer caer (al régimen) introduciendo 'cambios' en el sistema socialista, una cuna que nuestro pueblo considera más cara que su propia vida", añade KCNA.

 

AFP

Kim dijo además que Corea del Norte está dispuesta a enfrentar "cualquier tipo guerra, ya sea con fuerzas armadas convencionales o una guerra nuclear".

En una entrevista difundida en YouTube, realizada en la Casa Blanca el 22 de enero, Obama mencionó la eventual caída del régimen de Corea del Norte, país que calificó como "la más aislada, más sancionada y hermética nación de toda la Tierra".

El domingo pasado, un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores norcoreano calificó estas declaraciones de "tonterías". "Las recientes observaciones delirantes de Obama son sólo pobres gruñidos de un 'loser' (perdedor) arrinconado en su desafío en todos los frentes que lo oponen a Corea del Norte", dijo, citado por KCNA.

Corea del Norte habitualmente lanza discursos grandilocuentes respecto a Estados Unidos y sus dirigentes.

Recientemente, inclusive de corte racista, al calificar al presidente estadounidense, Barack Obama, de "mono", por incitar, a su juicio, a proyectar la polémica película "The Interview" sobre la muerte ficticia del líder norcoreano en un complot de la CIA, y amenazó con un "golpe demoledor irreparable".

El estudio de cine Sony fue víctima de actos de piratería informática masiva. Washington acusa a Pyongyang de haber instigado este ciberataque, lo que Corea del Norte niega.