Por: Javier Ansorena.

Filadelfia / 29-7-2016

En la convención de Filadelfia se han mezclado delegados demócratas y cargos políticos, comida basura, miles de globos, toneladas de confeti, manifestantes, un ejército de policías y miembros del servicio secreto, famosos, periodistas de todo el mundo, curiosos y, también, un pequeño grupo de políticos españoles.

El circo demócrata es el mayor espectáculo del mundo de la política y una oportunidad para dejarse ver y mantener las relaciones con los colegas de esta orilla. Al mismo tiempo, unas primarias muy competidas entre Hillary Clinton y Bernie Sanders han estirado tanto el espectro ideológico del partido demócrata que aquí encuentran acomodo políticos desde el Partido Popular hasta Podemos.

Para Antonio López-Istúriz, europarlamentario y secretario general del Partido Popular Europeo, es su primera convención demócrata. Es un veterano de las relaciones trasatlánticas entre Europa y EE.UU., pero siempre había acudido a la cita republicana, la que normalmente tiene más afinidad ideológica con su partido. Este año, al igual que gran parte de la centro-derecha europea, ningún miembro del PP ha querido mostrar un atisbo de apoyo a Donald Trump. «Los americanos están muy interesados en saber cómo afectará el Brexit», explica López-Istúriz al que ha acompañado también su compañero en el Parlamento Europeo Esteban González-Pons, y que ha tenido encuentros con la ex secretaria de Estado Madeleine Albright y Ken Wollack, presidente del National Democratic Institute, una red internacional de partidos.

«Las convenciones no son el mejor momento para conocer gente», asegura Juan Moscoso, ex diputado del PSOE y patrono de la Fundación Consejo España EE.UU. «Aquí todo pasa muy rápido, pero es importante estar, que vean que les apoyas y que estás cerca». Uno de sus contactos más cercanos es Tim Kaine, el candidato a vicepresidente.

Pablo Bustinduy, responsable de relaciones internacionales de Podemos, ha llegado invitado por la campaña de Bernie Sanders, la que ha protagonizado las revuelta contra el «establishment» demócrata. «Por encima del show y de los perritos calientes, ha habido mucha política», dice y reconoce que no ha tenido contactos formales con la campaña de la nominada, Hillary Clinton.

Entre continuas invocaciones a la unidad nacional, entre himnos y banderas estadounidenses, también han acudido representantes de partidos nacionalistas, como el presidente del PNV, Andoni Ortúzar, y el ex líder de Unió, Josep Antoni Duran i Lleida.

Albert Rivera, líder de Ciudadanos, estaba invitado por el partido demócrata, pero tuvo que cancelar su asistencia por la audiencia que ayer mantuvo con el Rey.

Fuente: ABC.es