Por: Alfonso Chardy

Miami/ 6-5-2017

Aníbal Mustelier, el legendario delincuente cubano que había evadido a las autoridades por más de un cuarto de síglo, fue encontrado culpable junto con otros dos acusados, tras un juicio de siete días en la Corte Federal de Miami.

Los tres – Mustelier, José Pineda Castro y Yamilé Díaz Bernal–fueron acusados de conspirar para realizar actos delictivos incluyendo el robo de dos joyerías en Hialeah y el intento de robo en una tercera.

La decisión del jurado marcó un punto culminante de la saga de Mustelier, apodado “El fantasma”, por sus habilidad de no dejarse capturar.

Por casi tres décadas, Mustelier dejó a su paso una estela criminal que incluyó intentos de asesinato, extorsión, y uno de los robos de bancos más espectaculares en la historia de Miami. Algunos sospechaban que también podría haber actuado como sicario de Fidel Castro en el sur de la Florida.

El juez Federico A. Moreno pronunciará su condena el 19 de julio.

Mustelier, Pineda Castro, y Diaz Bernal enfrentan penas de hasta 20 años por la acusación de conspiración para llevar a cabo actos delíctivos.

“Cuando estaban listos a cometer el robo, entraban al negocio adyacente la noche previa”, según una comunicado de la Fiscalía. “Entonces abrían un boquete desde el negocio adjunto y se preparaban para entrar a la joyería cuando llegaban los empleados a la mañana siguiente”.Según registros del tribunal, entre el 30 de mayo del 2015 y el ocho de agosto del 2016, Mustelier, Pineda Castro y la esposa de este, Díaz Bernal, conspiraron para robar dos joyerías en Hialeah. Un tercer robo fracasó cuando Pineda Castro accidentalmente cortó el cable que suministraba electricidad al centro comercial donde se ubica el establecimiento.

En ese momento, dice el comunicado, el grupo irrumpía en la joyería con las caras ocultas con pasamontañas y apuntando a los empleados.

“Entonces esposaban a los empleados y ponían las joyas en bolsas de lona grandes”, según el comunicado.

Un informante, dice el comunicado, ayudó a los investigadores a capturar a la banda al grabar una conversación entre Pineda Castro y Díaz Bernal.

“En esa conversación,” dice el comunicado, “la pareja implicó a Mustelier”.

Fue Pineda Castro, entonces, el que – sin saberlo –llevó a los investigadores a la misma puerta de la residencia de Mustelier, dice el comunicado.

“Ahí, encontraron, entre otras cosas, pasamontañas, armas, esposas y joyas pertenecientes a las dos joyerías que habís sido robadas como parte de su conspiración en curso”, dice el comunicado.

La policía de Hialeah fue la que iniciamnente informó sobre el arresto en agosto pasado.

Además de ser uno de los delincuentes más buscados, se le vinculaba a varios asesinatos por encargo de narcotraficantes en la década de 1980.

Muchos pensaban que Mustelier se ocultaba en Venezuela, Honduras o Cuba.

“Cuando revisamos sus antecedentes nos dimos cuenta que fuimos a pescar un mero, y atrapamos una ballena”, dijo Carl Zogby, vocero de la policía de Hialeah.

Mustelier fue uno de los partícipes el 17 de agosto de 1990 de un atentado con explosivos contra Francisco Condom-Gil, conocido como Frank Condom, un veterano de la invasión de Bahía de Cochinos quien además había sido arrestado en 1973 por narcotráfico.

Condom-Gil, de 55 años, estaba en el asiento del chofer de su Accura Legend estacionado frente a su casa en Coral Gables cuando estalló la bomba. Los atacantes no pudieron adherir los explosivos al auto y los dejaron en la calle.

El año anterior había sido víctima de otro intento de asesinato en La Pequeña Habana, donde fue herido en el brazo tras sobrevivir una ráfaga de disparos de ametralladora.

Condom-Gil atribuyó el atentado a su militancia anticastrista y no a su pasado criminal, según artículos de archivo del Miami Herald.

Además, Mustelier se le ha conectado al osado robo de joyas por $5 millones en 1996 en un banco en el sector financiero de Brickell.

Fue después de ese robo que Mustelier desapareció.