Agencia-Miami/ 18-2-2019
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump , elevó la presión sobre los militares en Venezuelapara que le den la espalda al régimen de Nicolás Maduro y respalden al presidente encargado, Juan Guaidó, al advertir en un discurso en Miami que el camino hacia la democracia es "irreversible", y que tienen la opción de trabajar para el futuro del país o perder todo lo que tienen.
"Viene un nuevo día en América latina", dijo Trump, en un discurso que fue más un manifiesto en contra de la doctrina socialista que un mensaje contra Maduro.
"El socialismo está muriendo", afirmó el mandatario.
El mandatario dejó por unas horas Mar-a-Lago, su resort en Palm Beach, donde viajó para aprovechar el fin de semana largo, y se movió a Miami a brindar un discurso sobre la crisis en Venezuela ante un público con fuerte presencia de venezolanos exiliados y latinos. Trump planteó la crisis humanitaria que azota a Venezuela como una consecuencia directa del socialismo, y prometió: "Esto nunca nos sucederá a nosotros".
Trump volvió a ofrecer un fuerte respado a Guaidó -el presidente interino grabó un mensaje que fue transmitido antes del discurso de Trump-, cuando faltan apenas días para que se cumpla el primer mes desde que la oposición lo designó al frente de un gobierno interino que busca desplazar a Maduro y llamar a elecciones "libres y justas" para abrir una transición hacia la democracia. Guaidó puso esa fecha, el próximo sábado 23 de febrero, como el límite para el ingreso de la ayuda humanitaria.
Funcionarios de Guaidó y sus aliados internacionales insisten en el ingreso de la ayuda humanitaria y la transición política dependen de lo mismo: que las Fuerzas Armadas abandonen a Maduro, y respalden al gobierno interino. Ese quiebre aún no ha ocurrido. Por eso, la Casa Blanca y los aliados de Guaidó han elevado la presión para forzar un giro. El mensaje de Trump fue el último esfuerzo de esa cruzada.
"No habrá regreso atrás", dijo Trump, quien cargó en varios tramos de su mensaje contra el socialismo. Trump puso a Nicaragua y Cuba en su lista de blancos, y advirtió: "El socialismo no respeta fronteras". Y lanzó un dardo contra Maduro: "No es un patriota venezolano, es un títere cubano".
Trump le habló directo a los militares: dijo que sabe dónde tienen el dinero que se robaron, y los instó a que acepten la amnistía que ha ofrecido la Asamblea Nacional. Trump les dio dos opciones: permitir el ingreso de la ayuda humanitaria y la transición democrática, o perderlo todo.
"Buscamos una transición democrática de poder, pero todas las opciones están abiertas", amenazó el mandatario. "Perderán todo", les advirtió a los militares.
Trump ha dicho en reiteradas ocasiones que no descarta recurrir a una invasión militar para sacar a Maduro del poder. El presidente de Colombia, Iván Duque, no descartó en su reciente paso por Estados Unidos permitir la presencia de tropas estadounidenses en Colombia, el país que más refugiados venezolanos alojó desde que se agravó la crisis humanitaria. Alrededor de tres millones de venezolanos han dejado Venezuela.
En una señal de las ramificaciones regionales de la crisis en Venezuela, Trump ofreció la visión que predomina dentro de la Casa Blanca y entre algunos aliados en el Congreso: una exitosa transición pacífica a la democracia en Venezuela puede ayudar a promover giros políticos similares en Nicaragua y Cuba.
"Estados Unidos nunca será un país socialista", dijo Trump, sobre el final.
Fuente: NTN24/ Yahoo Noticias