Uno de los textos, supuestamente dirigido al opositor Diego Arria, dice: "Ya creo que llegó la hora de acumular esfuerzos, hacer las llamadas necesarias y obtener el financiamiento para aniquilar a Maduro, y lo demás caerá solo".

En otro de los mensajes aparentemente señalaba que Whitaker le "reconfirmó el apoyo e indicó los nuevos pasos", y afirmaba que contaba "con una chequera más fuerte que la del régimen, para romper el anillo de seguridad internacional".

"Con relación al contenido que ellos presentaron ahí, quiero decirles que todos los correos y cada una de las palabras son falsas", dijo Machado, quien reconoció, no obstante, que las cuentas de correo presentadas por Rodríguez son de su propiedad, aunque una de ellas está inactiva desde hace más de un año.

La dirigente opositora anunció que presentará una denuncia formal por "simulación de hecho punible, usurpación de identidad, incitación al odio" ante la Fiscalía venezolana contra los dirigentes chavistas que formularon las denuncias en su contra.

"Yo sí voy a formular una denuncia porque estas supuestas pruebas en mi contra en el fondo los incriminan a ellos", dijo Machado, despojada del cargo de diputada en marzo pasado en una controvertida decisión del presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, y ratificada por el Tribunal Supremo.

Machado no pudo continuar ejerciendo como diputada después de que intentara participar en una sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) como parte de la representación de Panamá para denunciar la situación de vulneración de los derechos humanos que, según ella, vive Venezuela.

Cabello y el Supremo señalaron que eso suponía que se había convertido en representante panameña y que ese cargo era incompatible con el de diputada.

Por su parte, en un mensaje en la red social Twitter, Arria respondió a las acusaciones señalando: "Me robaron un iPhone y a través d él accedieron a mis cuentas d correo y redes sociales y fabricaron mensajes q no han sido escritos x mí" (sic).

Venezuela vive protestas contra el Gobierno desde hace más de tres meses que en algunas ocasiones han derivado en incidentes violentos que han dejado 42 muertos, más de 800 de heridos y centenares de encausados.

La respuesta de los EEUU

El Gobierno estadounidense tachó de "falsa e infundada" la acusación del chavismo de que el embajador de los EEUU en Colombia, Kevin Whitaker, estuvo involucrado.

"Cualquier acusación de ese tipo es infundada y falsa", dijo a la agencia EFE una fuente del Departamento de Estado respecto a las denuncias que implican a Whitaker.

"Hemos visto muchas veces que el Gobierno venezolano intenta distraer de sus propias acciones al culpar a los Estados Unidos o a otros miembros de la comunidad internacional de acontecimientos que ocurren dentro de Venezuela", añadió la fuente, que pidió el anonimato.

"¿Sabía el departamento de Estado de los EEUU que la ultraderecha venezolana cuando intenta sus eventos criminales (...) pide instrucciones y autorización a un oficial del departamento de Estado norteamericano? ¿Lo sabe el señor presidente Barack Obama?", se preguntó Rodríguez.

Precisamente este miércoles, el pleno de la Cámara de Representantes de los EEUU votó a favor de un proyecto de ley para sancionar a funcionarios del Gobierno de Maduro sospechosos de estar vinculados con la violación de derechos humanos durante las protestas en ese país.

La legislación queda ahora en manos del Senado, donde hay otro proyecto de ley similar en consideración. De ser aprobado un texto único requeriría la firma del presidente de los EEUU, Barack Obama, cuya Administración se ha mostrado hasta ahora reticente a imponer sanciones a funcionarios venezolanos.