Por Roberto de Jesús Guerra Pérez/ Hablemos Press.
Camagüey, 15 de febrero.― Prisioneros que adoptan una posición contraria al régimen castrista, recluido en la cárcel especial de máximo rigor Kilo Ocho en Camagüey, solicitan una inspección de la Organización de Naciones Unidas por las contantes violaciones contra los detenidos en ese recinto.
Ángel García Rivero, dijo que denuncia “ante la alta comisión de los derechos humanos de la ONU, la inhumana medida impuesta por el gobierno de Cuba de rebajar 10 gramos de la medida del arroz a la población penal de esta prisión”.
Rivero agregó que de 80 gramos de arroz que le daban “ahora son 70 y la población penal se encuentra totalmente afectada. Pero por el temor enraizado por el sistema represivo, nadie es capaz de reclamar sus derechos”.
El régimen cubano en el informe nacional del examen periódico del consejo de derechos humanos expresó textualmente “que la población penal en Cuba recibía una alimentación adecuad, superior a las 2400 calorías diarias por cada hombre”.
“Ni tan siquiera en las dietas recibimos estas calorías”, expresó Rivero y añadió que “las autoridades no han tenido el pudor de explicar de esta inhumana medida”.
Por su parte, Yoelvis Delgado Albelo, ex soldado castrista, condenado a cadena perpetua por tomar las armas contra el régimen y que también permanece en esa cárcel, solicita al secretario general de la ONU “que esta prisión sea inspeccionada”.
“Un relator especial debe inspeccionar esta cárcel, sin permitir una manipulación política”, indicó Albelo.
“Aquí hay hombres confinados a altas sanciones en celdas individuales sin condiciones. Celdas tapiadas, de 90 centímetros de anchos por 3 metros de largo, con poca luz y agua. Y la alimentación es tan mala que te destruye el organismo”.